Tras las acusaciones de varias jugadoras de tenis al presidente de la Real Federación, José Luis Escañuela, por el incumplimiento del acuerdo que firmaron con la RFET y con el CSD en el 2010, se ha anunciado la ruptura de las relaciones tanto a nivel profesional como personal.
Y así lo han querido reflejar siete de las nueve jugadoras que participarán en la Copa Federación durante el mes de febrero. Pero, aunque ya han declarado que esta ruptura no afectará a representar a España ante Ucrania en la ciudad alicantina, hay que recordar que hace dos años las tenistas se negaron a jugar.
¿Un milagro? En esta ocasión han decidido esperar a tener una respuesta por parte de la Federación o del CSD. ¿Pero hasta donde llegará la paciencia de las españolas?
Con unas elecciones por delante a la RFET, las jugadoras afirman que han llegado a una situación insostenible y que ninguna de ellas apoya a Escañuela.
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